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*Karen*
Estaba sentada en la cocina de la casa, me estaba tomando un café mientras pensaba como se sentiría ser madre, el pensamiento de ser madre ya se me había venido a la cabeza hace unos cuantos meses, cuando Black se casó con Midna, pero no podríamos tener un bebé siendo homosexuales, solo podemos si adoptamos o nos donan espermas... Ay Lizi, tu serás la que se encargará del bebé los nueve meses, porque la de aquí, sus menstruaciones son irregulares. Justo cuando la nombre, esta entró, con unas bragas blancas que en el centro tenía unos brownies y una sudadera con cuello que le quedaba algo pequeña, le quedaba por arriba de los glúteos.
-Linda vista -dije sin vergüenza, con una sonrisa pervertida.
-Cállate y deja de molestar.
-Uh, ya... Señorita malhumorada -me volteé para tomar un sorbo de café.
-Lo siento -viene hacía mi y me abraza- Me acabó de pelear con Camila.
-¿Y ahora de qué fue?
-De que ella me puede ganar mil veces en SSBB.
-Pero eso es cierto -me empecé a reír un poco por mi respuesta.
-Cállate -se fue avergonzada a abrir un cajón y sacar un delantal.
Liz prendió la hornilla, supuse que va a cocinar tortilla, ya que siempre cuando desayunamos, ella cocina tortillas pero siempre varían. Sacó una sartén y la puso en la hornilla prendida. Se acerco a la refrigeradora y sacó cuatro huevos y hotdogs, los empezó a cortar los hotdogs en un platillo, para esperar hasta que la sartén este lo suficientemente caliente. Ya lo estaba, sacó el aceite y le puso un poco, empezó a chispear, rompió los huevos y la clara con la yema se combinaron cuando cayeron, puso los hotdogs cortados en trocitos y los empezó a revolver.
-¡Tengo hambre! -replique al ver la ricura que estaba haciendo- ¿Cuando va a estar?
-Cuando yo lo diga -dijo en un tono dulce para mis oídos.
Se volteó, y volvió a revolver los huevos y los hotdogs; yo mientras, le veía su hermoso y formado trasero, esas braguillas me alocaban.
-Braguillas -musite. Parecía hipnotizada por aquel culo tan firme de mi querida esposa, ¿Por qué le tuve que enseñar esos trucos?
Me acerque lentamente a ella en cuatro patas. Cuando mi cara estaba a la altura de su trasero, agarre delicadamente sus bragas y las bajé, por lo visto ella no sintió nada, hasta que le lamí la nalga derecha. Ella volteó su cabeza y me miró con una de esas miradas fulminantes que te pueden hasta matar el alma. Bajó hasta quedar a mi altura, aún con las bragas abajo; vi su cara y estaba sonrojada, le mostré una sonrisa y ella me devolvió algo precioso... ¡Una cachetada!
-Cuanto has cambiado amor... -me encamine a la silla con una mano en la mejilla adolorida, raramente seguía con la sonrisa.
-¡Chúpate la chucha, el orto, el ano, y métete el puto dedo en el culo! -me lo decía subiéndose las bragas con la mano izquierda y la otra me sacaba el dedo medio.
FIN XD
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